República Checa: El crecimiento del PIB alcanza un máximo conjunto de tres años en el cuarto trimestre
Una segunda publicación mejoró la estimación preliminar del crecimiento económico en el cuarto trimestre y reveló que la economía cerró 2024 con una base más sólida: El crecimiento del PIB se aceleró hasta el 0,7% en tasa intertrimestral desestacionalizada en el cuarto trimestre (lectura preliminar: +0,5% intertrimestral anual), mejorando la subida del 0,6% revisada al alza del tercer trimestre y marcando el aumento más rápido desde el cuarto trimestre de 2021.
En términos anuales, el crecimiento económico aumentó hasta el 1,8% en el cuarto trimestre, frente al 1,4% del periodo anterior, lo que supone la mayor expansión desde el tercer trimestre de 2022. Como resultado, en 2024 en su conjunto, la economía creció un 1,0%, mejorando la expansión del 0,1% de 2023, pero manteniéndose por debajo de la media de 10 años anterior a la pandemia del 2,5%.
A nivel nacional, el crecimiento del consumo privado fue el principal motor del repunte secuencial, acelerándose hasta el 1,5% en el cuarto trimestre (3T: +0,9% intertrimestral) -el mejor resultado desde el tercer trimestre de 2021-, impulsado por el sólido crecimiento de los salarios reales. Dicho esto, el consumo público cayó por primera vez desde el 1T 2022, contrayéndose un 0,3% en el 4T (3T: +0,8% intertrimestral). Por otra parte, la inversión fija disminuyó un 1,5% en el cuarto trimestre (3T: +0,7% intertrimestral), entrando en terreno negativo por segunda vez en 2024. En el frente exterior, las exportaciones de bienes y servicios se contrajeron un 1,5% en el cuarto trimestre (+2,0% intertrimestral en el tercer trimestre), probablemente afectadas en parte por el malestar económico de Alemania, su principal socio comercial. Por otra parte, las importaciones de bienes y servicios se deterioraron, contrayéndose un 1,8% en el cuarto trimestre (3T: +3,6% intertrimestral).
Nuestros panelistas esperan que el crecimiento secuencial del PIB se mantenga en torno a los niveles del cuarto trimestre a lo largo de 2025. En consecuencia, nuestro consenso es que el crecimiento económico se acerque a la media decenal anterior a la pandemia en 2025: La inversión fija debería recuperarse gracias a la bajada de los tipos de interés y el consumo privado debería acelerarse. Además, las exportaciones deberían cobrar impulso, reforzadas por la mayor demanda de la UE. El seguimiento de la política comercial estadounidense será clave.
Jiri Polansky, analista de Erste Bank, comentó: «Vemos los riesgos como significativos y sesgados a la baja. Si se produce una guerra comercial entre EE.UU. y la UE, el crecimiento económico checo podría ser inferior en medio punto porcentual, dependiendo del alcance y la magnitud de los aranceles y de su calendario. La situación económica en Alemania sigue siendo otro riesgo, especialmente en caso de que se retrase la recuperación.»