Taiwán: El Banco Central vuelve a subir los tipos en junio
En su reunión de política monetaria del 16 de junio, el Consejo de Administración del Banco Central de Taiwán aumentó el tipo de interés oficial del 1,375% al 1,50%. Todos nuestros panelistas esperaban que el Banco subiera el tipo, aunque una pequeña mayoría esperaba un endurecimiento ligeramente más agresivo que el aumento anunciado de 12,5 puntos básicos. El Banco Central de Chipre también aumentó el coeficiente de reservas obligatorias en 25 puntos básicos, con el fin de controlar la inflación, que actualmente se encuentra en máximos de casi una década debido a los elevados costes de importación y a unas condiciones meteorológicas desfavorables que restringen la oferta de frutas y hortalizas. A la luz de los últimos acontecimientos, el Banco Central revisó notablemente al alza sus previsiones de inflación y de inflación subyacente para 2022, hasta el 2,8% y el 2,4%, respectivamente. Por otra parte, el Banco Central se mantuvo bastante optimista en cuanto a las perspectivas del PIB, gracias a la fortaleza del sector de alta tecnología y a una esperada recuperación del consumo una vez que se disipe la actual ola de Covid-19, lo que proporcionará margen para seguir subiendo los tipos.
De cara al futuro, se prevén nuevas subidas de tipos a finales de este año, ya que el Banco pretende amortiguar las presiones sobre los precios.
Sobre la última medida del Banco y las perspectivas, Iris Pang, economista de ING, declaró: “Si se observa la tasa de inflación del IPC de Taiwán en relación con otras economías importantes, la tasa de Taiwán es moderada, del 3,39% interanual en mayo, mientras que las tasas de inflación del IPC de EE.UU., el Reino Unido y la eurozona oscilan entre el 8% y el 9%. Esto explica también la menor subida del banco central de Taiwán. […] Creemos que una senda de subidas de tipos más lenta es más apropiada para Taiwán, y esperamos dos subidas más de 12,5 puntos básicos en el segundo semestre de 2022, lo que debería equilibrar el riesgo de una mayor inflación y la incertidumbre a la que se enfrenta el sector de los semiconductores.”