Rumanía: El BNR sube inesperadamente los tipos en octubre
En su reunión del 5 de octubre, el Banco Nacional de Rumanía elevó el tipo de interés oficial del 1,25% al 1,50%. La medida, que supuso la primera subida desde 2018, sorprendió a los analistas del mercado, que esperaban en gran medida que el Banco se mantuviera al margen. Además, el Banco elevó el tipo de la facilidad de depósito del 0,75% al 1% y el tipo de la facilidad de préstamo (Lombard) del 1,75% al 2,00%. No obstante, mantuvo sin cambios los coeficientes de reservas obligatorias para los pasivos de las entidades de crédito denominados en divisas y en leu, en el 5,00% y el 8,00%, respectivamente.
Una revisión al alza de las expectativas de inflación a corto plazo explica en gran medida la decisión del Banco de endurecer su política monetaria. En julio y agosto, la inflación general aumentó por encima del límite superior del intervalo fijado por el Banco Central entre el 1,5% y el 3,5%, debido en gran medida a factores externos relacionados con la oferta, en particular la subida de los precios de la energía. Como se espera que estas presiones de la oferta persistan a corto plazo, las estimaciones de inflación se han revisado significativamente al alza. En este contexto, los indicadores disponibles sugieren que el crecimiento se aceleró ligeramente en términos secuenciales en el tercer trimestre, lo que, unido al aumento del crédito al sector privado a un ritmo de dos dígitos en julio-agosto, llevó al Banco a iniciar un ciclo de endurecimiento.
De cara al futuro, el comunicado del Banco no incluía ninguna orientación firme. El Banco señaló que pretende “recuperar y mantener la tasa de inflación anual en línea con el objetivo de inflación plana del 2,5% ±1 punto porcentual, entre otras cosas mediante el anclaje de las expectativas de inflación en un horizonte temporal más largo”. Entretanto, el Banco subrayó que las turbulencias políticas internas podrían poner en peligro el proceso de consolidación presupuestaria y amenazar la estabilidad macroeconómica.
En cuanto a las perspectivas de la política monetaria, Ciprian Dascalu, economista jefe de Erste Bank, declaró: “Al adelantar las subidas, el BNR probablemente aspira a lograr un tipo terminal más bajo para el actual ciclo de endurecimiento, aunque esto depende en gran medida de las perspectivas fiscales. Creemos que el tipo terminal del ciclo actual, situado en el 2,50%, se alcanzará a mediados de 2022, y no a finales de ese año, ya que es probable que la consolidación fiscal se retrase con respecto a lo previsto en el anterior escenario de previsiones, dadas las incertidumbres políticas” La próxima reunión de política monetaria está prevista para el 9 de noviembre.