Rumanía: El PIB disminuye a menor ritmo en el primer trimestre
Una segunda publicación confirmó que el PIB cayó a un ritmo más moderado del 0,2% interanual en el primer trimestre, tras la contracción del 1,4% registrada en el cuarto trimestre del año pasado. La lectura del 1er trimestre marcó el mejor resultado desde el 1er trimestre de 2020 y reflejó una mejora generalizada. El consumo privado repuntó en el 1T, creciendo un 0,8% interanual y contrastando con la contracción del 6,2% registrada en el 4T 2020. Por otra parte, el crecimiento de la inversión fija se aceleró hasta el 9,9% en el 1T desde el 6,5% del trimestre anterior, mientras que el gasto público creció un 2,9% (4T 2020: +1,9% interanual).
En el frente exterior, las exportaciones de bienes y servicios repuntaron en el primer trimestre, creciendo un 0,9% interanual y contrastando con el descenso del 1,8% del 4T 2020. Además, el crecimiento de las importaciones de bienes y servicios repuntó hasta el 4,9% en el 1T (4T 2020: +2,3% interanual), marcando la mejor lectura desde el 4T 2019. En términos intertrimestrales desestacionalizados, el crecimiento económico se desaceleró notablemente hasta el 2,8% en el 1T desde el 4,6% del periodo anterior.
Al comentar las perspectivas, los analistas de la EIU señalaron:
«A pesar de las elevadas tasas de infección y mortalidad por coronavirus en relación con sus homólogos de la UE durante gran parte de 2020, Rumanía evitó aplicar un estricto bloqueo nacional durante la segunda y tercera oleadas de la pandemia. Esto hizo que la recesión fuera poco profunda para los estándares de la UE y ha allanado el camino para un retorno a los niveles de actividad anteriores a la pandemia en muchos sectores. [Ciprian Dascalu y Eugen Sinca, analistas de Erste Bank, añadieron: «Hemos revisado nuestra previsión de crecimiento económico para 2021 hasta el +6,7% desde el +4,2% tras las grandes sorpresas positivas del 4T20, con su consiguiente efecto de arrastre, y del 1T21. Se espera que los ingresos reales apenas crezcan este año, ya que el mercado laboral aún no se ha ajustado plenamente a los cambios permanentes en el comportamiento de los consumidores. La demanda reprimida de los hogares y las inversiones estatales deberían ser los principales motores del crecimiento este año.»