Polonia: El crecimiento anual del PIB se acelera en el cuarto trimestre
El crecimiento económico se aceleró en el cuarto trimestre, con un aumento anual del PIB del 1,0% (3T: +0,5% interanual). La lectura del cuarto trimestre marcó el mejor resultado desde el tercer trimestre de 2022. En términos intertrimestrales desestacionalizados, la economía se estancó, tras el aumento del 1,1% registrado en el trimestre anterior.
El gasto de los hogares se debilitó, cayendo un 0,1% interanual en el cuarto trimestre, lo que contrasta con la expansión del 0,8% del tercer trimestre. Mientras tanto, el crecimiento del gasto público se aceleró hasta el 5,7% en el cuarto trimestre (3T: +3,3% interanual). El crecimiento de la inversión fija se aceleró hasta el 8,7% en el cuarto trimestre, frente al 7,2% del tercero. En el frente exterior, las exportaciones de bienes y servicios repuntaron, aumentando un 2,7% en el cuarto trimestre (-11,0% interanual en el tercer trimestre). Por su parte, las importaciones de bienes y servicios disminuyeron a un ritmo más suave del 2,8% en el cuarto trimestre (-20,3% interanual en el tercer trimestre).
El ritmo de crecimiento económico se acelerará significativamente este año a partir de 2023. El consumo privado se beneficiará de la bajada de la inflación y los tipos de interés, así como del aumento de los salarios reales, mientras que la recuperación de la demanda externa e interna debería apuntalar la actividad industrial. El desembolso más rápido de lo previsto de los fondos de la UE plantea un riesgo al alza, mientras que las repercusiones adicionales de la guerra entre Rusia y Ucrania suponen un riesgo a la baja.
Al comentar las perspectivas, Rafal Benecki y Adam Antoniak, de ING, declararon: “Seguimos siendo optimistas sobre el crecimiento económico en 2024 y prevemos un repunte hasta el 3%. Esto se apoya en un aumento dinámico de la renta real disponible asociado a una menor inflación, un aumento de los salarios nominales (una gran subida del salario mínimo y un aumento del 20-30% en la administración pública), así como un aumento de las prestaciones sociales. […] El principal riesgo para las perspectivas económicas es el bajo rendimiento de la economía alemana, que, combinado con la fortaleza del zloty y la mayor competencia de precios de los fabricantes asiáticos, puede traducirse en un deterioro de la balanza comercial exterior.”