Países Bajos: La confianza de los consumidores sigue deteriorándose en enero
La confianza de los consumidores empeoró hasta situarse en -28,0 en enero, frente al -25,0 de diciembre. La caída se debió al empeoramiento de las opiniones sobre el clima económico del país y al descenso de la disposición de los consumidores a comprar. Las opiniones sobre la economía neerlandesa tanto en el pasado como en los próximos 12 meses se deterioraron, y las actitudes hacia la situación financiera de los hogares en los mismos períodos empeoraron paralelamente.
El crecimiento del consumo privado debería acelerarse este año en medio de un mercado laboral tenso y la desaparición del impacto de la pandemia y los cuellos de botella en el suministro. Sin embargo, la balanza de riesgos está sesgada a la baja, y los analistas de EIU añaden: «Hemos rebajado nuestra previsión de crecimiento del consumo privado para el primer trimestre de 2022 después de que el Gobierno aplicara un nuevo bloqueo a mediados de diciembre. El impacto en nuestra previsión global de crecimiento del PIB para 2022 es leve […]. […] Es probable que el patrón trimestral de actividad sea volátil, lo que refleja la probabilidad de que la pandemia siga planteando problemas, con Omicron (y probables variantes futuras) que afectarán al ritmo de crecimiento. Una vez que la pandemia haya remitido, […] [l]a mayor inflación a corto plazo erosionará la renta disponible, impidiendo un crecimiento aún mayor del consumo privado en 2022.»