Filipinas: El PIB se acelera en el cuarto trimestre, superando las expectativas del mercado
Según una lectura preliminar, el crecimiento del PIB mejoró hasta el 7,7% interanual en el cuarto trimestre, desde el 6,9% del tercer trimestre, superando una vez más las expectativas del mercado. La lectura significó que el crecimiento global de 2021 alcanzó el 5,6%, recuperándose de la contracción del 9,6% registrada en 2020. El repunte del consumo privado, que aumentó un 7,5% en el cuarto trimestre (+7,1% en el tercer trimestre), se debió en gran medida a la mayor solidez de los datos, favorecida por la relajación de las restricciones y el menor número de casos de Covid-19. Por otra parte, el gasto público se contrajo en el cuarto trimestre. Por otra parte, el crecimiento del gasto público disminuyó al 7,4% en el cuarto trimestre (+13,8% interanual en el tercer trimestre). El crecimiento de la inversión fija también se moderó al 9,5% en el cuarto trimestre, frente al 15,5% del tercer trimestre. En el frente exterior, el crecimiento de las exportaciones de bienes y servicios cayó al 8,3% en el cuarto trimestre, lo que supone el peor resultado desde el primer trimestre de 2021 (tercer trimestre: +9,1% interanual). Por el contrario, el crecimiento de las importaciones de bienes y servicios aumentó hasta el 13,7% en el cuarto trimestre (+13,0% interanual en el tercer trimestre).
En términos intertrimestrales desestacionalizados, el crecimiento económico se mantuvo estable en el 3,1% en el cuarto trimestre, tras el aumento del 3,1% del periodo anterior. La lectura del cuarto trimestre marcó el mejor resultado desde el tercer trimestre de 2020.
Al comentar las perspectivas, los economistas de Nomura Euben Paracuelles y Rangga Cipta se muestran escépticos sobre la posibilidad de mantener este impulso: “Esperábamos una desaceleración del impulso a partir del tercer trimestre de 2021, ya que el tercer trimestre se vio impulsado en parte por una demanda de bienes duraderos reprimida tras los cierres, que pensamos que no era sostenible. […] El crecimiento del consumo privado repuntó [en términos anuales a pesar de que] el crecimiento secuencial cayó sustancialmente […]. Esto refleja en parte la ralentización del crecimiento del gasto en bienes duraderos, como automóviles y muebles, en consonancia con nuestra opinión de que la demanda acumulada en estos artículos se desvanecerá. Por su parte, Chua Han Teng, economista de DBS, subraya el riesgo que la variante Omicron supone para el impulso futuro: “La recuperación económica de Filipinas, que depende en gran medida de la demanda interna, especialmente del consumo privado (que representa más del 70% del PIB, el más alto de la región), sigue estando supeditada al flujo y reflujo de las respuestas sanitarias. Las restricciones víricas más localizadas y calibradas siguen teniendo un impacto negativo en la movilidad del comercio minorista y recreativo, como se desprende de la fuerte caída registrada durante la ola Omicron en enero.”