Estados Unidos: El crecimiento del PIB cobra impulso en el primer trimestre
Según una estimación preliminar del PIB publicada por la Oficina de Análisis Económicos, la economía creció un 6,4% en el primer trimestre en términos anualizados ajustados estacionalmente (SAAR), superando las expectativas de los analistas de un crecimiento del 6,1% y acelerando desde el aumento del 4,3% del trimestre anterior. En términos anuales, el PIB aumentó un 0,4% en el primer trimestre, tras caer un 2,4% en el cuarto trimestre de 2020, lo que supone el primer aumento anual desde el primer trimestre del año pasado. La aceleración del primer trimestre se debió principalmente al mayor crecimiento de la demanda interna. La implantación relativamente rápida de vacunas respaldó la confianza de los consumidores y las empresas, mientras que el fuerte estímulo fiscal en forma de donaciones de efectivo proporcionó un impulso a finales del trimestre, tras la aprobación del paquete de alivio Covid-19 del Presidente Biden. El crecimiento del consumo privado ascendió al 10,7% SAAR (4T 2020: +2,3% SAAR), mientras que el gasto público aumentó un 6,3% en el 1T (4T 2020: -0,8% SAAR). Dicho esto, el crecimiento de la inversión fija se moderó al 10,1% desde el 18,6% del trimestre anterior. En cuanto al sector exterior, las exportaciones de bienes y servicios cayeron un 1,1% en el primer trimestre, tras crecer un 22,3% en el cuarto trimestre del año pasado, mientras que el crecimiento de las importaciones de bienes y servicios se redujo al 5,7% desde el 29,8% del cuarto trimestre. El sector exterior restó así 0,9 puntos porcentuales a la cifra global, lo que fue menos pronunciado que la sustracción de 1,5 puntos porcentuales del cuarto trimestre.
En cuanto a las perspectivas para el segundo trimestre, Katherine Judge, economista sénior de CIBC World Markets, señaló: “Es probable que el crecimiento en el segundo trimestre sea enérgico dado el exceso de ahorro que tienen los consumidores, así como el potencial de reconstrucción de las existencias de fabricación, aunque el sector del automóvil en particular se enfrentará a desafíos como resultado de la escasez de chips.”De cara al futuro, James Knightley, economista jefe internacional de ING, señaló: “La economía estadounidense ya ha experimentado un estímulo de 5 billones de dólares a través de las medidas promulgadas por los presidentes Trump y Biden, y está previsto que se vea impulsada por un gasto adicional de 4 billones de dólares, parcialmente compensado por algunas subidas de impuestos, gracias a los últimos planes de infraestructuras y gasto social de Joe Biden. Eso equivale a alrededor del 40% del PIB en conjunto y con los balances de los hogares en gran forma y la economía estadounidense abriéndose cada vez más deberíamos esperar un crecimiento muy fuerte durante varios trimestres.”