Hungría: La segunda lectura confirma que la economía se contrajo a un ritmo más suave en el cuarto trimestre de 2020
Una segunda publicación sobre el PIB confirmó que el ritmo de contracción económica se moderó considerablemente en el cuarto trimestre de 2020, con una caída interanual del PIB del 3,6% (anteriormente: -3,7% interanual), tras el descenso del 4,6% registrado en el trimestre anterior. Mientras tanto, el PIB creció un 1,4% intertrimestral desestacionalizado en el cuarto trimestre (anteriormente: +1,1% intertrimestral anual), tras el repunte del 11,0% del tercer trimestre, que había marcado la mayor expansión registrada. En el conjunto del año, la economía se contrajo un fuerte 5,0%, lo que contrasta fuertemente con la expansión del 4,6% de 2019. En cuanto a los detalles de la publicación, mientras que el sector exterior se benefició de un mejor entorno comercial internacional, el comportamiento de la economía nacional fue más desigual. El consumo de los hogares cayó un 4,2% en términos anuales, tras el descenso más suave del 2,1% del 3T, en medio de un sentimiento bajista de los consumidores y unas medidas de contención de Covid-19 más estrictas. Sin embargo, la inversión fija se recuperó y creció un 1,2% en el cuarto trimestre (-13,7% interanual en el tercer trimestre), reflejando el aumento de la inversión en construcción y en maquinaria y equipos. Por su parte, el gasto público se disparó un 6,2% (T3: -2,6% interanual), en el marco de los esfuerzos del Gobierno por impulsar la economía. En el frente exterior, las exportaciones de bienes y servicios crecieron un 1,7% en el cuarto trimestre (T3: -4,8% interanual), ya que la relajación de los cierres en el extranjero favoreció la demanda exterior. Del mismo modo, las importaciones de bienes y servicios aumentaron un 0,9% en el cuarto trimestre, tras la caída del 4,5% registrada en el tercero.
Comentando las perspectivas económicas, Peter Virovacz, economista jefe de ING en Hungría, declaró:
“Los datos del cuarto trimestre revisados hoy al alza también significan que el efecto de arrastre en 2021 puede ser ligeramente superior al calculado anteriormente. Si el PIB real húngaro se estanca durante este año, sólo debido a los buenos resultados del 4T20, la economía crecerá un 2,2% de media. Además, vemos un importante potencial de crecimiento en la economía durante este año. Así pues, el impulso del crecimiento durante el año será positivo y probablemente alcance un máximo histórico. Algunos de los datos del cuarto trimestre, principalmente el combo construcción/inversión, también sugieren un crecimiento subyacente más dinámico este año” De cara al futuro, la economía se recuperará notablemente en 2021 tras la recesión inducida por la pandemia del año pasado. La demanda interna y externa debería fortalecerse gracias a la relajación de las políticas fiscal y monetaria, la entrada de fondos de la UE y la reapertura gradual de la economía mundial. Sin embargo, la incertidumbre sobre la disponibilidad de vacunas supone un riesgo a la baja.