Tailandia: El PIB se contrae ligeramente en el tercer trimestre
La economía volvió a la contracción en el tercer trimestre, con una caída interanual del PIB del 0,3%, que contrasta con la expansión del 7,6% registrada en el segundo trimestre. Sin embargo, los analistas del mercado esperaban un descenso más acusado. En términos intertrimestrales desestacionalizados, el PIB se contrajo un 1,1% en el tercer trimestre, en contraste con la expansión del 0,1% del periodo anterior. La desaceleración se debió al debilitamiento del consumo privado y la inversión fija. El gasto de los hogares se contrajo un 3,2% en el 3T, marcando el descenso más pronunciado desde el 2T 2020 (2T: +4,8% interanual), probablemente como consecuencia del aumento de los casos diarios de Covid-19 durante el verano. Del mismo modo, la inversión fija se contrajo, cayendo un 0,4% en el 3T y contrastando con el aumento del 7,6% registrado en el trimestre anterior. En cambio, el gasto público aumentó un 2,5% en el tercer trimestre (2T: +1,0% interanual), atenuando algo el descenso general. En el frente exterior, las exportaciones de bienes y servicios aumentaron un 12,3% interanual en el tercer trimestre, muy por debajo de la expansión del 27,7% del segundo trimestre. Además, el crecimiento de las importaciones de bienes y servicios disminuyó al 27,8% en el tercer trimestre (+30,3% interanual en el segundo). De este modo, el sector exterior restó 8,5 puntos porcentuales al crecimiento global en el tercer trimestre, lo que supone un notable deterioro con respecto a la resta de 1,4 puntos porcentuales del segundo trimestre.
En su comunicado, la Oficina de la Junta Nacional de Desarrollo Económico y Social afianzó sus perspectivas para 2021, proyectando una expansión de la economía del 1,2%, tras haber previsto un crecimiento de entre el 0,7% y el 1,2% en sus previsiones de agosto. Además, proporcionó una estimación de crecimiento de entre el 3,5% y el 4,5% para 2022, previendo una recuperación de la demanda interna a medida que mejore la situación de la pandemia y avance la vacunación. Por otra parte, la reciente relajación de las restricciones de entrada para los viajeros vacunados debería impulsar las cifras del turismo en el nuevo año, contribuyendo a reforzar las exportaciones en 2022. En cuanto a las perspectivas, Krystal Tan, economista de ANZ, se muestra optimista: “En general, las perspectivas económicas de Tailandia están mejorando, aunque el alza del repunte se verá limitada por el ritmo de recuperación de los flujos de viajes internacionales y la prolongada presión sobre las finanzas de los hogares. Mantenemos nuestra previsión de crecimiento para 2022 en el 4,5%, que es el extremo superior de la proyección del NESDC. Chua Han Teng, economista del DBS Bank, se muestra más cauto: “Tailandia se enfrenta a considerables riesgos de cicatrización, y la frágil recuperación también está plagada de incertidumbres externas, como la ralentización de China y el aumento de los precios mundiales de la energía. Así pues, mantenemos nuestra previsión de crecimiento real del PIB para 2022 en el 3,5%, a partir de una tasa revisada al alza del 1,2% en 2021 (desde el 0,6%). Tailandia sigue siendo un rezagado regional, con un retorno de los niveles del PIB real a los niveles anteriores a la pandemia sólo hacia finales de 2022/principios de 2023. Dada la aún delicada recuperación económica y los considerables riesgos de cicatrización, esperamos por tanto que las políticas económicas (monetarias y fiscales) sigan siendo sincrónicas y acomodaticias en los próximos trimestres, ya que los responsables políticos pretenden proporcionar un apoyo continuado a la incipiente recuperación.”