Tailandia: El PIB disminuye a un ritmo más suave en el cuarto trimestre
El PIB disminuyó un 4,2% interanual en el cuarto trimestre, por encima de la contracción del 6,4% registrada en el tercer trimestre, continuando así la recuperación desde el desplome del segundo trimestre, que había marcado la peor lectura desde la crisis financiera asiática de 1997-1998. La cifra del cuarto trimestre superó las expectativas del mercado y reflejó la relativa contención de la pandemia en el país durante el periodo. En términos intertrimestrales desestacionalizados, el crecimiento económico se ralentizó hasta el 1,3% en el 4T, tras el repunte del 6,2% del 3T. Para el conjunto de 2020, el PIB se contrajo un 6,1%, notablemente por debajo del crecimiento del 2,3% del año pasado y la peor lectura desde 1998. La mejora del 4T en términos anuales reflejó una vuelta al crecimiento del consumo privado: El gasto de los hogares aumentó un 0,9% interanual en el cuarto trimestre, en contraste con el descenso del 0,6% del tercer trimestre, impulsado por un repunte del gasto en bienes duraderos. Por su parte, la inversión fija disminuyó a un ritmo más suave del 2,5% en el 3T, frente a la caída del 2,6% registrada en el trimestre anterior. Sin embargo, el crecimiento del gasto público cayó al 1,9% desde el 2,5% del trimestre anterior, limitando un poco la mejora de la demanda interna. En el ámbito exterior, las exportaciones de bienes y servicios cayeron un 21,4% anual en el cuarto trimestre, por encima de la contracción del 23,3% del tercer trimestre, con una mejora impulsada por la mejora de las exportaciones de bienes, aunque las exportaciones de servicios siguieron muy reprimidas. Por otra parte, las importaciones de bienes y servicios disminuyeron a un ritmo más suave del 7,0% en el cuarto trimestre (-19,3% interanual en el tercer trimestre).
En su comunicado, la Oficina de la Junta Nacional de Desarrollo Económico y Social actualizó sus perspectivas para 2021, previendo que la economía crezca entre un 2,5% y un 3,5% -un porcentaje relativamente conservador en comparación con la mayoría de las previsiones de nuestros panelistas y un punto porcentual menos que sus previsiones de noviembre- a medida que la mejora de la demanda interna y la recuperación del entorno exterior impulsen la actividad. Sin embargo, el repunte de los casos tanto en el país como en el extranjero, junto con las actuales restricciones a los viajes que afectan al importantísimo sector turístico, constituyen importantes vientos en contra de la recuperación en 2021. En cuanto a las perspectivas, Barnabas Gan, economista de United Overseas Bank, comentó: “[Las] perspectivas de crecimiento de Tailandia en 2021 dependerán de tres factores clave: (1) el entorno del Covid-19, (2) la situación política nacional y (3) el telón de fondo del comercio mundial. Es probable que el reciente repunte de las infecciones por Covid-19 en Tailandia desde diciembre de 2020 afecte negativamente a la confianza de los consumidores. El ruido político que rodea a las protestas que exigen reformas reales también puede inyectar vientos en contra del crecimiento si se intensifica aún más. Charnon Boonnuch y Euben Paracuelles, analistas de Nomura, comparten preocupaciones similares a corto plazo y afirman: “Reiteramos nuestra previsión de un modesto repunte del crecimiento del PIB en 2021, hasta el 2,8% en 2021. […] Esto implica que la producción económica no volverá a los niveles anteriores a la crisis de Crimea este año, sino sólo en el primer trimestre de 2022, quedando rezagada con respecto a otros países de la ASEAN, como Singapur y Malasia.”