Suecia: El Riksbank mantiene los tipos sin cambios en noviembre; amplía las compras de activos
En su reunión del 26 de noviembre, el Riksbank mantuvo sin cambios su política monetaria, manteniendo su tipo de interés de referencia en el 0,00%, al tiempo que ampliaba y prorrogaba su programa de compra de activos. La decisión se produjo en medio de unas perspectivas más pesimistas, ya que el Banco señaló que “la nueva oleada de infecciones del otoño y unas directrices generales más estrictas hacen que la actividad en algunas partes de la economía vuelva a mostrar una desaceleración”. Además, el Riksbank comentó que “se prevé que los efectos negativos sobre el mercado laboral duren mucho tiempo; al final del periodo de previsión [finales de 2024], se espera que la tasa de empleo siga siendo inferior a la de antes de la crisis”. Por ello, el Banco consideró necesario mantener su orientación acomodaticia y seguir inyectando liquidez para impulsar la recuperación gradual de la economía. Con este fin, el Banco amplió su programa de compra de activos en 200 000 millones de coronas suecas, elevando el importe nominal total a 700 000 millones de coronas suecas. Además, decidió acelerar el ritmo de compras durante el primer trimestre de 2021 y amplió el alcance del programa para incluir bonos verdes municipales, letras del Tesoro y deuda soberana, que se suman a los bonos del Estado, municipales e hipotecarios estándar que ya se están adquiriendo en el marco del programa. Para dar un paso más en sus credenciales medioambientales, el Consejo también declaró que “sólo ofrecerá comprar bonos corporativos emitidos por empresas que se considere que cumplen las normas y estándares internacionales de sostenibilidad”. Hasta el 20 de noviembre, el Banco había comprado un total de 266.000 millones de coronas suecas en el marco del programa, que se prolongará hasta el 31 de diciembre de 2021. Mientras tanto, el Banco rebajó sus previsiones del PIB para 2020 y 2021, en línea con su postura más pesimista. Así, ahora espera que el PIB se contraiga un 4,0% en 2020, frente a la caída del 3,6% estimada en el informe de septiembre. Asimismo, revisó a la baja su previsión de crecimiento para 2021 hasta el 2,6% desde el 3,7% de la estimación de septiembre. Las expectativas de inflación también se redujeron a corto plazo, con la previsión del IPCAC disminuyendo al 0,4% para 2020 (informe de septiembre: 0,5%). Para 2021, el Banco prevé que la inflación se sitúe en el 0,9% (informe de septiembre: 1,2%).
De cara al futuro, el Riksbank reiteró su postura moderada en su comunicado, afirmando que “está dispuesto a seguir utilizando las herramientas a su disposición para apoyar la economía y la inflación”, y que “el tipo repo también puede recortarse si se considera una medida eficaz, especialmente si la confianza en el objetivo de inflación se viera amenazada”.
En cuanto a las perspectivas del tipo repo, Knut Hallberg y Robin Ahlén, analistas de Swedbank, comentaron: “No esperamos más cambios en la política monetaria a corto plazo y mantenemos nuestra previsión de un tipo repo sin cambios en el 0% en 2020-22. Un recorte del tipo aún puede ser relevante en el momento en que la inflación se vea amenazada. Esta opinión es compartida por Christian Schnittker y Alexandre Stott, economistas de Goldman Sachs, que comentaron: “De cara al futuro, esperamos que el Riksbank mantenga su política monetaria sin cambios durante algún tiempo”.
El próximo anuncio de política monetaria se publicará el 10 de febrero de 2021.