Dinamarca: El PIB repunta en el segundo trimestre
La segunda publicación de las cuentas nacionales confirmó el repunte de la actividad económica en el segundo trimestre, con un aumento intertrimestral del 2,3% ajustado estacionalmente (anteriormente: +2,2% intertrimestral), frente a la contracción del 0,9% registrada en el primer trimestre. En términos anuales, el crecimiento económico fue mayor de lo estimado inicialmente, con un aumento del PIB del 8,5% en el trimestre (anteriormente: +8,2% interanual), en contraste con el descenso del 0,7% del periodo anterior. En consecuencia, el PIB danés superó en el segundo trimestre sus niveles anteriores a la pandemia.
A nivel nacional, la mejora fue generalizada. El consumo privado creció un 4,3% intertrimestral desestacionalizado en el segundo trimestre, frente a la contracción del 5,1% registrada en el primer trimestre. Es probable que los hogares hayan liberado parte de sus ahorros por precaución, ya que las restricciones de Covid-19 se fueron levantando a lo largo del trimestre, y la tasa de desempleo disminuyó considerablemente (2T: 4,8%; 1T: 6,1%). Por otra parte, el gasto público repuntó, creciendo un 2,5% en el 2T (1T: -1,8% intertrimestral). Por último, la inversión fija también volvió a crecer, aumentando un 3,7% y contrastando con el descenso del 3,8% registrado en el trimestre anterior. Mientras tanto, el sector exterior lastró el crecimiento global en el 2T. Las exportaciones de bienes y servicios se contrajeron un 2,5% en el trimestre (1er trimestre: +3,8% intertrimestral). Por el contrario, las importaciones de bienes y servicios se recuperaron y crecieron un 0,2% (T1: -4,0% intertrimestral).
De cara al futuro, es probable que el impulso se haya extendido al tercer trimestre, ya que las autoridades prevén reabrir totalmente la economía a principios de septiembre -a pesar de un repunte de las tasas de infección-, a medida que la campaña de vacunación siga avanzando rápidamente. La tasa de desempleo siguió bajando en julio, mientras que los consumidores se mostraron cada vez más optimistas en julio-agosto, lo que es un buen augurio para el consumo de los hogares. Por otra parte, la confianza de las empresas también fue optimista en el mismo periodo de dos meses, lo que probablemente apoye la inversión en el trimestre.