Zona euro: El BCE mantiene los tipos en septiembre
En su reunión de los días 10 y 11 de septiembre, el Banco Central Europeo (BCE) decidió mantener su tipo de depósito en el 2,00%. También mantuvo sus tipos de refinanciación y de préstamo en el 2,15% y el 2,40%, respectivamente. La decisión siguió al mantenimiento de julio y se ajustó a las expectativas del mercado.
Al justificar la decisión del Banco, la Presidenta Lagarde señaló que el proceso desinflacionista había terminado y que los riesgos para la economía estaban más equilibrados que antes. Mientras tanto, el Banco anunció que sus últimas previsiones de inflación media eran similares a las de junio: 2,1% en 2025, 1,7% en 2026 y 1,9% en 2027, lo que reforzaba su decisión de mantener la calma. Aun así, las perspectivas de inflación siguen siendo más inciertas de lo habitual en un entorno comercial volátil.
La presidenta Lagarde afirmó que las perspectivas de inflación son favorables, que la zona euro está mostrando resistencia y que los riesgos para las perspectivas generales están más equilibrados. En consecuencia, nuestros panelistas siguieron retirando sus previsiones de un último recorte de 25 puntos básicos para finales de 2025 y la mayoría espera ahora que el BCE se mantenga firme a finales de año. El Banco volverá a reunirse los días 29 y 30 de octubre.
Los analistas de Nomura comentaron: «No hay nada en la declaración de la reunión de septiembre ni en la conferencia de prensa que nos haga cuestionar sustancialmente nuestra opinión de que el BCE mantendrá los tipos sin cambios en un futuro previsible, sobre todo porque es probable que el crecimiento del PIB alcance su tasa tendencial a mediados de 2026, la inflación IPCA está rondando el objetivo del BCE del 2,0%, y el tipo de interés de los depósitos está cerca de la visión neutral del BCE», mientras que Carsten Brzeski, de ING, dijo: «Hemos subrayado antes que el listón para otro recorte de tipos por parte del BCE sigue siendo alto. No obstante, existen algunos argumentos válidos de carácter pesimista que podrían obligar al banco central a seguir recortando los tipos en los próximos meses. Pensemos en lo siguiente: los responsables políticos de la eurozona en general son cada vez más conscientes de que el acuerdo marco comercial entre EE.UU. y la UE es cualquier cosa menos inamovible. La condicionalidad incorporada en muchos aspectos ha dejado margen suficiente para nuevas escaladas. Pero piense también en un tipo de cambio del euro más fuerte y una previsión de inflación subyacente inferior al 2% para 2026 y 2027.»