Costa Rica: La economía se ralentiza en el primer trimestre
El crecimiento del PIB se moderó hasta el 3,8% interanual en el 1T (4T: +4,6% interanual), igualando la media de 10 años anterior a la pandemia. En términos intertrimestrales desestacionalizados, el crecimiento económico disminuyó notablemente hasta el 0,2% en el 1T, tras el aumento del 1,6% del trimestre anterior y marcando la peor lectura desde el 2T de 2020.
En el plano interno, el crecimiento del gasto de los hogares cayó al 3,1% en el primer trimestre (+3,4% interanual en el cuarto trimestre de 2024), lo que supone la expansión más débil desde el cuarto trimestre de 2022, en un contexto de subida de los precios de consumo. Por otra parte, el crecimiento del consumo público se suavizó hasta el 1,0% en el 1T (4T 2024: +1,8% interanual). Además, el crecimiento de la inversión fija se moderó al 4,3% en el 1T, tras el 12,9% registrado en el trimestre anterior.
En el frente exterior, el crecimiento de las exportaciones de bienes y servicios cayó al 4,7% en el 1T (4T 2024: +6,2% interanual), lo que supone el peor resultado desde el 3T 2023. Las exportaciones de bienes se ralentizaron, mientras que la caída de las exportaciones de servicios se suavizó ligeramente con respecto al 4T; la fortaleza sostenida del colón ha lastrado la actividad turística en los últimos trimestres, y las empresas han pedido al Banco Central que baje los tipos para recuperar competitividad. Mientras tanto, el crecimiento de las importaciones de bienes y servicios se ralentizó hasta el 4,8% en el 1T (4T 2024: +7,3% interanual).
Nuestro consenso es que el crecimiento económico se reduzca aún más en el segundo trimestre, ya que la fortaleza sostenida del colón sigue siendo un lastre para el sector turístico y un arancel estadounidense del 10,0% sobre los productos costarricenses dificulta las exportaciones. En el conjunto de 2025, el crecimiento del PIB debería desacelerarse con respecto a 2024; la ralentización de los salarios reales mantendrá a raya el gasto privado. Dicho esto, el gasto público y la inversión fija mejorarán. Los riesgos están sesgados a la baja y giran principalmente en torno a los aranceles estadounidenses. El aumento de la inseguridad interna, que afecta a la inversión y al turismo, es un riesgo adicional a la baja.
Los analistas del EIU comentan así las perspectivas: «Ya habíamos previsto rebajar nuestra previsión de crecimiento real del PIB para este año en nuestras próximas perspectivas, desde el nivel actual del 3,6%, debido a nuestra previsión de una menor demanda de exportaciones y un golpe a la inversión impulsado por el sentimiento. Como esperamos que el crecimiento en el segundo y tercer trimestres sea más lento que en el primero, el débil resultado de enero-marzo significa que recortaremos entre 0,1 y 0,2 puntos porcentuales de nuestra previsión del PIB. Así pues, esperamos un ritmo de crecimiento inferior al 3,6-3,8% que prevé el BCCR».