Egipto: Las condiciones del sector privado no petrolero se deterioran a mayor ritmo en marzo
El índice global de gestores de compras (PMI) de S&P, que mide la actividad empresarial en el sector privado no petrolero, cayó a 46,7 en marzo, frente al 46,9 de febrero. De este modo, el índice se situó aún más por debajo del umbral de 50,0 sin cambios, en el que lleva estancado desde noviembre de 2020. La lectura señaló un deterioro más pronunciado de las condiciones operativas del sector privado con respecto al mes anterior.
El descenso de marzo se debió principalmente a una fuerte contracción de los nuevos pedidos, ya que las fuertes presiones inflacionistas frenaron la demanda de los clientes. Esto, unido a las dificultades para obtener insumos clave debido al control de las importaciones y a las restricciones monetarias, provocó una marcada caída de los niveles de producción. Esta evolución llevó a las empresas a reducir sus niveles de empleo por cuarto mes consecutivo en marzo. Más positivamente, la economía de los servicios experimentó la primera mejora de la actividad desde agosto de 2021. En cuanto a los precios, el continuo debilitamiento de la libra egipcia frente al dólar estadounidense provocó un aumento de la factura de las importaciones. Los precios de producción subieron en marzo, pero al ritmo más suave de los últimos cinco meses. Esta menor subida se debió a los esfuerzos de las empresas por sostener la demanda. Por último, la confianza de las empresas alcanzó en marzo su nivel más alto en tres meses. Sin embargo, la confianza sigue siendo una de las más débiles en la historia de la serie, que comenzó a principios de 2012.