Brasil: Las condiciones del sector manufacturero se deterioran a un ritmo más suave en enero
El índice de gestores de compras del sector manufacturero mundial S&P (PMI) invirtió una racha de descensos de siete meses y subió a 47,5 en enero desde el mínimo de 31 meses de diciembre de 44,2. Como resultado, el índice se acercó al umbral de 50,0 sin cambios, aunque se mantuvo por debajo del mismo. Esto apunta a un deterioro más leve de las condiciones empresariales en el sector manufacturero con respecto al mes anterior.
El repunte de enero se debió a un descenso más suave tanto de los nuevos pedidos como de la producción. Los nuevos pedidos cayeron al ritmo más lento de los últimos cuatro meses. Dicho esto, las ventas siguieron contrayéndose debido a la subida de los precios, que debilitó la demanda, y a la incertidumbre sobre la política fiscal nacional. En el plano internacional, las ventas se vieron mermadas por la menor demanda de América Latina, en medio de los temores de recesión y de un entorno mundial en general difícil. En consecuencia, las empresas siguieron recortando la producción en enero, pero lo hicieron al ritmo más suave desde septiembre de 2022. La debilidad de la demanda, la reducción de la producción y los esfuerzos por recortar costes se tradujeron en un nuevo mes de destrucción de empleo, aunque también a un ritmo más moderado.
En cuanto a los precios, los costes de los insumos aumentaron en enero al ritmo más elevado de los últimos cinco meses, debido a los fuertes incrementos de los precios de los alimentos, los metales, los plásticos y algunos componentes importados. Por último, las empresas se mantuvieron optimistas sobre las perspectivas de crecimiento gracias a la recuperación prevista de la demanda, la inversión y el lanzamiento de nuevos productos. Sin embargo, la confianza disminuyó con respecto a diciembre, debido a la incertidumbre sobre la política fiscal de la nueva administración y a los elevados costes de endeudamiento.